Escritura jeroglífica

El conocimiento de la lengua egipcia y sus diferentes tipos de escritura es fundamental para el estudio de la civilización faraónica.

La escritura jeroglífica o (medu necher, “palabras divinas”) era considerada como un regalo de los dioses, una invención de Tot, deidad de la sabiduría. Los signos jeroglíficos y sus simplificaciones en formato cursivo (hierático y demótico) fueron ampliamente utilizados por los antiguos egipcios para redactar incontables documentos escritos, fuente fundamental para el conocimiento de la civilización faraónica. En este sentido, se conservan detallados registros administrativos en los que se detallan cantidades de productos de todo tipo; relatos mitológicos escritos sobre las paredes de tumbas, templos o papiros; textos de carácter privado; textos literarios o científicos; decretos reales, etcétera. Gracias a la labor erudita iniciada por el sabio francés J. F. Champollion, quien en 1822 publicó los primeros resultados relativos al desciframiento de la escritura jeroglífica, ha podido recuperarse una parte importante del antiguo Egipto, tras muchos siglos de ignorancia y olvido.

El dios Imhotep. Bronce. Dinastía XXVI (664-525 a.C.).

Imhotep, un ser humano, convertido en dios dos mil años después de su muerte, representa el genio y el triunfo de una cultura. Como hombre sabio se representa con un rollo de papiro desplegado entre sus manos. Patrón de los escribas durante el Reino Nuevo, éstos le ofrecían una gota de sangre o de agua antes de iniciar un trabajo.

Obelisco perteneciente al Amigo Único , llamado Hemre . Caliza. Dinastía VI (2323-2150 a.C.).

Estos pequeños obeliscos se han localizado principalmente en las capillas de culto de las tumbas del Reino Antiguo, en algún caso al lado de las mesas de ofrendas. Además de las connotaciones religiosas con la divinidad solar, es un elemento que proporciona los datos más importantes del propietario de la tumba: su nombre y sus títulos.

 

Fragmento de relieve parietal con un personaje noble escribiendo en la pared de su tumba. Caliza. Dinastía XIX (1307-1196 a.C.).

Un personaje vestido con la indumentaria típica del visir, está escribiendo en la pared de su tumba. Con la mano izquierda sujeta una concha y con la derecha un cálamo; bajo la silla hay un objeto interpretable como un contenedor de papiros.

La Piedra de Rosetta Reproducción en yeso del original conservada en el Museo Británico.

Los textos que contiene la piedra de Rosetta, redactados en tres tipos diferentes de escritura, son una muestra de la situación del Egipto de los ptolomeos, un país bajo la protección de los dioses tradicionales (texto jeroglífico) poblado por una mayoría de egipcios nativos (texto demótico) y una minoría de origen extranjero (texto griego). Tres tipos de escritura por un mismo texto: un decreto promulgado en Menfis en el año 9 de Ptolomeo V (196 a.C.) que proclama una reducción de los impuestos que afectaba al ejército y sobre todo a los templos. La comparación de los textos en jeroglífico y en griego, sobre todo de los signos utilizados por la redacción del nombre de Ptolomeo en ambas versiones, fue la clave que puso a Jean François Champollion en el camino que le conduciría al brillante desciframiento de la escritura jeroglífica, publicado oficialmente en 1822.